Si cualquier mes de agosto es especial para nosotras por la fiesta de Santa Cándida, este ha superado a todos por estar celebrando un año jubilar, los 150 de la fundación de la Congregación. Seguro que lo has seguido por la web de los 150 pero, como siempre, te dejamos el resumen del mes. ¡Disfrútalo!
EL CAMINO DE LA MADRE CÁNDIDA | Colegio Mayor Montellano (Salamanca)
Continuamos conociendo el camino de la Madre Cándida a través de edificios emblemáticos de la Congregación. En agosto nos hemos acercado al palacio de Montellano, hoy Colegio Mayor.
A finales de septiembre de 1877, las Hijas de Jesús se trasladan a Montellano, un noble edificio construido en el siglo XV. Una parte de él se dedicó para las hermanas, tanto profesas como novicias, y la otra para el colegio, que abrió sus puertas el 1 de octubre de ese mismo año. En este emblemático edificio, la Madre Cándida pasó muchas horas escribiendo las Constituciones, primero, para su aprobación diocesana en 1892 y, más tarde, para conseguir la aprobación del Santo Padre. Este lugar también fue testigo, en 1894, del primer Capítulo General de la Congregación, en el que la Madre Cándida fue elegida Superiora General. El 9 de agosto de 1912 moría en esta misma casa. Si no has visto todavía el vídeo, no te lo pierdas pinchando en la imagen. Montellano.
CELEBRACIÓN EN MEMORIA DE SANTA CÁNDIDA MARÍA DE JESÚS | 9 de agosto
En un día tan importante para nuestra Congregación, nos unimos para celebrar la vida de Santa Cándida. Voces y rostros de todo el mundo cuentan quién fue la Madre Cándida y cómo, a pesar de los años, sigue viva en todos y cada uno de los que formamos parte de su familia. Escucha, canta, reza y reflexiona con este video preparado con tanto cariño. (Accede al vídeo pinchando en la imagen)
Y tú… ¿Qué celebras de la vida de la Madre Cándida? ¿Qué semilla ha puesto Dios en tu corazón?
12 MESES, 12 EXPERIENCAS – La gratitud, actitud constante en la Madre Cándida
«Cándida María de Jesús se experimenta criatura, agraciada, bendecida, querida, amada y llamada por Dios, en medio de sus limitaciones. Desde su pobreza evangélica, se abre al don de Dios y se siente invitada a corresponder con amor y gratitud. La gratitud fue una de las fortalezas humanas vivida como virtud».
Antonia Sotelo, FI nos habla de este rasgo tan característico en la vida de la M. Cándida y desde el que nos invita a vivir a las Hijas de Jesús y a todos aquellos con los que tiene relación. ¿Te animas a dejarte contagiar?
Accede al artículo AQUÍ o desde la web de los 150.
