Dentro de muy poco las Hijas de Jesús estaremos en la isla de Flores, en la ciudad de Ruteng, Indonesia. Una idea que surgió en 2016 y que este año se hace oficial con la nueva fundación.
Pero, ¿cómo es Indonesia? ¿cómo son las personas que viven allí? Nos lo cuenta, de nuevo, Emelinda Falsis FI, Superiora provincial de Índico – Pacífico.
Indonesia es un país de mayoría musulmana, sin embargo, hay un gran sentido de respeto por la religión católica. En un país donde los católicos son una minoría, nos encontramos en la isla de Flores con un 95% de católicos. La mayor parte de ellos se encuentran en la Diócesis de Ruteng.
¿Cómo es la cultura del país?
Habiendo estado en la ciudad de Ruteng, en la isla de Flores, Indonesia, varias veces desde el período de exploración hasta la fundación de la nueva comunidad, yo diría que podemos adaptarnos fácilmente a su cultura y a la inversa. Basándome en lo que he experimentado personalmente, yo diría que la gente de Ruteng es muy afectuosa, amable y hospitalaria, y nos han hecho sentir realmente en familia.
Un día necesitábamos instalar la conexión a internet en la casa y pedimos ayuda a nuestros vecinos. Al día siguiente pudimos tener la conexión a internet. Con profundo agradecimiento les dije: “Muchas gracias porque hemos encontrado nuevos amigos en ustedes.” Pero me emocioné cuando me respondieron diciendo “Hermana Lynn, no somos solo amigos… somos familia.” En mi interior yo me dije: “¡Oh vaya! Yo tengo el carisma de filiación y fraternidad, pero ellos lo viven. Me pregunté si esta actitud es solo con nosotras porque somos religiosas, pero no, creo que son así con todos. Lo vimos nosotras mismas cuando tuvieron una reunión vecinal en la calle. Efectivamente, hay un sentido profundo de espíritu de comunidad y familia en el vecindario. Nos retan a vivir nuestro carisma con mayor intensidad.


La adaptación a su cultura no ha sido muy difícil porque los filipinos y los indonesios tienen muchas cosas similares en algunos aspectos de la vida, pero tambien podemos aprender muchas cosas de su cultura. Como los filipinos, también ellos dan mucho valor a las actividades familiares y comunitarias. Tienen un profundo respeto por sus padres difuntos. Son católicos practicantes. Los domingo se llenan las iglesias. Dan importancia a la religiosidad y a la piedad. Aprecian su trabajo por insignificante que sea. Aprecian a sus seres queridos y dedican tiempo a charlar con ellos tomando un café o un té. Son muy sencillos y humildes. Sus casas son sencillas. Les gusta comer verduras y comidas con especias. Me di cuenta que la parte más grande de la casa es la cocina. Reciben afectuosamente a sus amigos y visitas en su “ante sala”. Tienen un lugar especial reservado para las personas que consideran como familia mas cercana.
¿Qué destacas de la presencia de las Hijas de Jesús allí?
Ruteng ha sido ya evangelizada por los Padres del Verbo Divino y por otras Congregaciones religiosas femeninas. Por tanto ¿que más podemos ofrecer a la gente como Hijas de Jesús? En este tiempo de sinodalidad, nuestra presencia en la isla de Flores nos exigirá simplemente caminar con la gente de Ruteng, en particular con las jóvenes confiadas a nuestro cuidado. Esperamos acompañarles en su crecimiento y desarrollo para poder llegar a ser miembros útiles en la comunidad y la sociedad. Queremos ser sus hermanas,compañeras de camino, una familia a la que puedan acudir y un lugar seguro de formación para ellas.

¿Qué similitudes hay entre el carisma de las Hijas de Jesús y su cultura?
Creo que nosotras como Congregación podemos fácilmente vibrar con su cultura ya que ambos damos mucha importancia al espíritu de familia y comunitario, a la hermandad, fraternidad y hospitalidad. Ambos valoramos el talento de los jóvenes y la sabiduría de los mayores. Ellos miran a Dios como Padre providente, misericordioso y amoroso. Tienen una gran devoción a la Virgen y quieren a la Iglesia a pesar de los escándalos cometidos por algunos sacerdotes en el pasado. En Ruteng, nos sentimos muy a gusto con la bondad y el afecto de la gente. ¡somos parte de una gran familia!
¿Cuál es la vinculación de las Hijas de Jesús con el país?
Lo que nos une con el país es nuestro compromiso de acompañar y caminar con los jóvenes especialmente en la formación del carácter de las niñas de los grados 10 al 12 que estudian en la ESCUELA St. KLAUS, Kuwu, Ruteng. Estas adolescentes serán el futuro del país y estamos contentas de poder colaborar en el desarrollo de su crecimiento personal y espiritual.

