Inauguramos un tiempo en el que cada una somos llamadas a prepararnos para la próxima Congregación General (CG). Como nuestra Fundadora, dejemos que Jesús, el Hijo encarnado, crucificado y resucitado, sea quien nos introduzca en un nuevo período de vida para el Cuerpo congregacional.
Una CG es siempre un tiempo de gracia, es una oportunidad:
- para dejarnos encontrar por el Señor en nuestra identidad más profunda, ser verdaderas Hijas de Jesús.
- para caminar juntas y descubrir en nuestros entornos comunitarios que Él allí también está presente y nos desafía a un magis.
- para hacer de su preparación una experiencia espiritual en la que, de hecho, queremos que el Espíritu Santo sea el protagonista.
- Orar con sus elementos fundamentales
El logo representa nuestra identidad y el proceso que nos disponemos a vivir. Mantiene el logo actual de la Congregación con sus elementos fundamentales y lo que transmiten:
- IHS: Jesús en el centro.
- Cruz: Identidad. Darse.
- Círculo: Comunidad. Mundo. Universales. Acogida.
- Líneas abiertas: Abrazo. Acogida. Apertura. Todos caben. Fraternidad.
- Tipografía: Sencillez. Claridad. Legibilidad.
- Colores: Serenidad. Alegría. Diversidad. Hoy.
Hecho con el estilo one line, dibujos hechos con un solo trazo, sin interrupciones, representa dinamismo y vitalidad, además de aportar un tono de frescura y alegría al conjunto de la imagen de marca.
¿Cómo me resuenan estas características? ¿Las veo reflejadas en mi vida y en la de otras Hijas de Jesús? ¿Cuál de ellas siento como don que Dios me ha dado? ¿Cuál necesito más en este momento de mi vida?
Para la CG XIX, se añaden tres figuras que bien podrían ser cada una de nosotras, de nuestras comunidades, nuestro caminar con otros o nuestras conversaciones en el camino, junto a Jesus, como los discípulos que regresan a Emaús.
¿De qué hablamos nosotras por el camino? ¿Dónde nos sale al paso Jesús? ¿A quién me recuerdan estas tres figuras? ¿Qué me evocan?
Caminan hacia la identidad sobre una línea que las sostiene, acoge, orienta… Las dificultades, a pesar de nuestro deseo de fidelidad, hacen que nuestro caminar sea muchas veces cuesta arriba, lleno de curvas y obstáculos.
¿Cómo siento que es el camino de mi vida, de mi día a día? ¿Cómo lo vivo? ¿Me sostiene o me cansa? ¿Qué curvas experimento? ¿Cuáles son mis obstáculos? ¿Qué camino me bloquean?
Pero, con Él, es posible afrontar el camino. Juntas. En Él. Desde nuestra individualidad pero en comunión de diversidades. Dejando que emerja lo mejor de cada una.
¿Cómo he afrontado y afronto los caminos de mi vida? ¿Con quién? ¿Qué es lo mejor de mí? ¿Qué es lo mejor de aquellas con las que hago comunidad?
Ponemos en Jesús resucitado la esperanza, no en nosotras, no en nuestros medios y capacidades. Esta esperanza queda reflejada en los rayos de luz que salen de la cruz.
¿Dónde pongo mi esperanza? ¿Dónde la encuentro? ¿Dónde hallo la luz para andar mi camino, el que el Espíritu me inspira?
- Oramos con nuestras Constituciones
El logo de la CG XIX está inspirado en el número 318 de nuestras Constituciones que nos recuerda que la Congregación no fue constituida con medios humanos y tampoco ha de conservarse con ellos, sino en la fuerza de Cristo.
«Porque la Congregación, que no se ha instituido con medios humanos, no puede conservarse ni aumentarse con ellos, sino con la mano omnipotente de Cristo, Dios y Señor nuestro, es necesario en Él sólo poner la esperanza de que conservará y llevará adelante la obra que se dignó comenzar». CFI 318
Por eso, sólo en Él queremos poner nuestra esperanza y hacer el camino de preparación junto a Él. (Flp. 1,6)
- Oramos con una Iglesia en salida
«El Espíritu Santo posee una inventiva infinita» (EG 178). Recorrer el camino con Él, juntas, escuchando y discerniendo su voz nos hará audaces, creativas en el Señor, viviremos y construiremos un camino de esperanza.
Deseamos que la Congregación General XIX sea:
- Con Él, camino de escucha.
- Con Él, camino de participación.
- Con Él, camino de comunión.
- Con Él, camino de creatividad.
- Con Él, camino de esperanza.
El logo recoge el deseo de caminar en esta CG XIX, con Él, hacia nuestra identidad para ser hoy la presencia que el Espíritu Santo está suscitando en nosotras. Dejemos que Jesús despierte nuestra creatividad y con ella nos haga portadoras de esperanza a un mundo tan necesitado de motivos para esperar.
¿Qué sabor me deja el logo? ¿Qué se ha despertado en mí en esta oración? ¿A qué me invita?