Estamos a punto de cumplir un año de la primera asamblea sinodal, octubre 2023, y nos vamos adentrando, poco a poco en la segunda.
Esta vez hemos vivido unos previos interesantes: los días 27, 28 y 29 de septiembre se nos ofreció formación a Facilitadores/as para seguir acompañando el proceso de los grupos en las mesas redondas.
Coordinados por Giacomo Costa sj y otros compañeros, durante estos días asistimos a la formación citada en el CIAM (Centro Internacional de Animación Misionera) que se encuentra dentro de la Universidad Urbaniana.
Allí de 9 a 18 horas, fuimos desgranando el Documento de Trabajo y viendo el mejor modo de ayudar a los grupos al discernimiento, mediante la Conversación en el Espíritu.
Ya reencontrarnos fue motivo de alegría, conociendo varias personas que no estaban en este servicio el pasado año.
Los días 30 y 1 nos dedicamos al retiro espiritual, todos los padres y madres sinodales, acompañados por Timothy Radcliff, dominico y Maria Ignazia Angelini, benedictina.
La tarde del 1 tuvimos una celebración penitencial presidida por el Papa Francisco, quien en nombre de toda la iglesia pidió perdón por los pecados cometidos por la misma. Fue una experiencia muy honda y hecha con realismo llamando a las cosas por su nombre. Escuchar testimonios directos de una persona abusada, otra migrante, y así varias, tocaba el corazón y sentíamos el dolor y la vergüenza de haber fallado a las personas desde el interior de la iglesia.
Pero el Papa Francisco insistió en la petición de perdón acudiendo al Dios misericordioso que no se cansa de perdonar. Insistía en que no puede haber sinodalidad sin reconciliación, sin reconocer las heridas que hemos causado.
Fueron días de disponer el corazón para las sesiones de trabajo que el día 2 comenzamos. Después de la eucaristía de apertura nos dirigimos a aula sinodal para recibir las indicaciones del uso electrónico de nuestro trabajo.
La tarde estuvo dedicada a la apertura oficial con el discurso del Papa, del Secretario General, Relator y los coordinadores de los diez grupos de estudio de temas diversos que nos dieron cuenta de cómo van trabajando.
Cada día nos vamos adentrando en la agenda de este mes; confiamos en las oraciones de tantas personas, en que el Espíritu nos conduce y deseamos ser fieles a sus inspiraciones para dar la mejor respuesta que necesitamos como iglesia en la sociedad aquí y ahora.
Seguiremos informando…
María Luisa Berzosa FI, Roma.
