Circular nº 8 de la Superiora General a toda la Congregación (I)
La Superiora General, Graciela Francovig, escribe su circular nº 8 a todas las hermanas de la Congregación en el día que hacemos memoria agradecida de la vida del P. Miguel de los Santos Herranz, jesuita que acompañó, aconsejó y ayudó muy de cerca a la M. Cándida y a las primeras Hijas de Jesús en los comienzos de la Congregación.
Hoy, 5 de julio, recogemos la mención que hace del P. Herranz y cómo lo relaciona con el momento mundial que estamos viviendo. La UISG lleva meses hablando de «re-imaginar el futuro». ¿Re-imaginar cuando vamos siendo menos y de más edad? 150 años después las palabras que nos dijo el P. Herranz en los comienzos cobran especial relevancia y con ellas encabeza Graciela su carta:
‘No importa, la obra no es vuestra, es de Dios
y Él sabe y conoce los instrumentos que escoge;
el triunfo no está en el número ni en las cualidades naturales,
sino en la abnegación de la voluntad y en el sacrificio del corazón’.
Y nos dice por qué:
«He querido iniciar mi carta con estas palabras del P. Herranz a las primeras Hijas de Jesús en aquel día fundacional. Me parecieron apropiadas para cada una de nosotras hoy que parece que en el mundo estamos fundando, re-imaginando, nuevos comienzos. Y les invito a leerlas en clave personal, comunitaria, provincial y como Cuerpo universal. Hoy queremos hacer memoria familiar, agradecida, de este Jesuita que acompañó a la M. Cándida y a las primeras Hijas de Jesús en los comienzos de nuestra historia, de quien humildemente nos hizo tanto bien».
La primera reflexión es sobre la pandemia y la necesidad de silencio para asimilar lo que ha ocurrido y cómo situarnos ante ello.
«Desde mi última carta circular hasta hoy ha pasado un tiempo prolongado. Yo necesitaba ‘este silencio’ para atravesar el tiempo de confinamiento y aún el actual que vivimos en Italia; para acoger tantas muertes como se produjeron en este país y tanto dolor de la humanidad; para preguntarle a Dios cómo animar un Cuerpo-congregación ‘enviado’ al mundo, atravesado hoy por una pandemia.
No puedo dejar de sentir cómo van siendo los efectos de este virus en los lugares donde estamos presentes las Hijas de Jesús. En Asia, donde comenzó todo, la evolución parece avanzar de manera serena. Algunos países aún siguen confinados, otros poco a poco van abriendo caminos y fronteras. Europa, donde continuó, la situación vivida en los dos países donde nos encontramos, Italia y España, fue dramática. En América y África creo que aún continúa un ascenso de contagios y muertes. Con lo que supone de empobrecimiento de estos pueblos, de una atención sanitaria de más precariedad y donde los más empobrecidos son los más afectados. Aunque los países estén fuera del confinamiento exigido, estamos en aprendizajes de nuevos protocolos, de nuevas maneras de relacionarnos y comportarnos en sociedad. Ya nada es como antes. A veces pienso que tendremos que aprender a convivir con este virus.
El impacto de lo que estamos viviendo nos ha llevado a reconocernos aldea global afectada por lo inesperado1. Una mirada de fe nos hace creer que Dios está actuando en este tiempo para un bien mayor para la humanidad. Necesitamos pedir esa gracia.
Hay decisiones concretas que como VC tendremos que asumir en este presente histórico para ser respuesta a la sociedad post-pandemia. ¿Qué estilo comunitario? ¿Qué gestos de nueva pobreza hemos de asumir? ¿Qué ha de nacer? ¿Cómo se presenta el cuidado de los mayores tras el Covid 19? ¿Y la casa común? Estas y otras preguntas son las que quedan pendientes de una mayor profundización.
Esta situación, que ya ha cambiado la vida de la humanidad, ¿en qué nos cambiado a nosotras? En esta humanidad sufrida nosotras estamos llamadas a encontrar al Señor allí y pedir la gracia de que nos diga “cómo hemos de colaborar con Él para seguir salvando a nuestros hermanos”. “…es cosa más digna de consideración ver a Cristo nuestro Señor …a cada una en particular llama y dice… quien quisiere venir conmigo ha de trabajar conmigo, porque, siguiéndome en la pena, también me siga en la gloria” [EE 95]».
Además, comparte algunas reuniones, nombramientos y envíos que han tenido lugar en estos meses de confinamiento y aparente inactividad.
Reunión de Superioras Provinciales
El encuentro con provinciales pensado para febrero fue reprogramado para mayo, vía Skype. Permitió saber lo que pasaba en uno y otro lugar del Cuerpo de manera directa. Compartieron juntas sobre la comunicación (más allá de las páginas web), la Formación, desde el inicio hasta la formación permanente, y la situación de frontera de algunos países en los que estamos.
Admisión a la Última Probación
En reuniones de enero y de abril he admitido a la Ultima Probación a las siguientes junioras:
1. Claribel Jerez
2. Florie May
3. Silvia Rozas
4. Juana G.
5. Magdalena Z.
6. Mary Z.
7. Cándida Z.
Dada la situación que estamos viviendo, esta Última Probación ha sido pospuesta un año, por lo que será de octubre de 2021 a febrero de 2022.
Envíos internacionales
«Aún en tiempos de pandemia, los envíos son una manera de vivir el dinamismo del Cuerpo, la disponibilidad para ir a atender las necesidades que surgen:
– H. Sofía Contreras va enviada a España, después de haber cumplido el trienio de Superiora de la Casa Curia. Viajará el día 8 de julio y en estos días estamos de despedidas, agradeciendo cuánto ha hecho en bien de la Congregación en esta Casa.
– H. María Luisa Berzosa González ha sido enviada a la Casa Curia. María Luisa tiene varios servicios a la Iglesia universal, a la UISG, a Fe y Alegría internacional. Aunque no es necesario que viva en Roma, sin embargo me ha parecido conveniente que los lleve adelante desde esta casa, donde también colaborará en su organización y en otros servicios que pueda encomendarle.
– H. María del Carmen Jiménez es enviada a la Comunidad de Uruguay. Si bien este envío lo comunico ahora, María del Carmen se incorporará a esa comunidad a fin de 2020, si las fronteras lo permiten. De lo contrario irá cuando pueda. Ahí también se nos hace palpable nuestra disponibilidad.
Estos son los envíos internacionales que ya puedo comunicar. Hay otros en proceso de discernimiento. En varios momentos pienso que estos envíos serán a partir del Covid 19. Este ha cerrado fronteras y ha paralizado en algún sentido nuestros movimientos, pero no nuestros deseos de ir más allá y de estar para los lugares más necesitados».
Nombramientos de Formadoras en Asia Oriental
Maestra de Junioras para el Juniorado en Vietnam a la H. Inés Ma.
He renovado el nombramiento de la H. Magda Zhang, Maestra de Novicias en el Noviciado de Asia Oriental en Manila.
Otros discernimientos, una posible presencia en Amazonia.
«Con alegría comunico que es nuestro deseo, y estamos en esa búsqueda, de tener una presencia en Amazonia. Por supuesto, siempre con otros, nunca solas. El 29 de junio, en la fiesta de San Pedro y San Pablo, nació la Conferencia Eclesial de la Amazonía, un nuevo organismo de vital importancia para la misión pastoral de la Iglesia en América Latina y el Caribe. Es sin duda un fruto del Sínodo. He considerado mucho, desde la Eucaristía de clausura del Sínodo en la Basílica de San Pedro a la expresión del Documento final, el pedido de la Iglesia a la Vida religiosa a estar presente en esta realidad tan sufrida y necesitada. Le pido al Señor que confirme los discernimientos de hermanas que manifiestan sus deseos de estar presentes en este lugar de nuestro Continente».
Termina con el número 11 de la Determinación animándonos a que «todas lo pidamos como un don al Señor»:
‘La vivencia de la verdadera pobreza evangélica, según el tercer párrafo de nuestra Fórmula, es una dimensión integradora que podrá cualificar otros aspectos de nuestra vida en los que también sentimos necesidad de conversión. Es una gracia en la que pedimos ser recibidas, que nos ayudará a formar el nuevo rostro de la Hija de Jesús que el mundo necesita hoy’.
1 Re-imaginar el futuro. La vida religiosa en América Latina y el Caribe. Junio 2020