Este día marcó la segunda parte del encuentro internacional de Jóvenes FI en Roma. Luego de haber caminado juntos ayer por la Ruta de la Madre Cándida, hoy se reencontraron en un lugar muy especial: la Casa Curia en Roma, un espacio lleno de historia, espiritualidad y cariño familiar.
La cita reunió a: los 52 jóvenes FI peregrinos de Argentina, Bolivia, República Dominicana y España -que vienen caminando juntos desde Badalona-, el grupo de 14 jóvenes FI de Taiwán quienes compartieron con las Hijas de Jesús de la comunidad de la Casa Curia y de la Regina Pacis.
Un sueño que se hace encuentro
En este espacio significativo se celebró el Tercer Encuentro Internacional de Jóvenes FI, el primero en formato presencial, tras dos encuentros virtuales y un largo camino recorrido con esperanza. Cada mes fueron esperanzado con la serie de videos en cada mes; además de encuentros locales presenciales y virtuales, viviendo así una verdadera peregrinación interior.
Hoy, las palabras de Santa Cándida resonaron con fuerza: “Dios lo quiere”… “El mundo es pequeño para mis deseos”.



Un espacio de familia
Las hermanas de la Casa Curia acogieron al grupo con cariño, compartiendo momentos de encuentro profundo. Uno de los hitos del día fue el recorrido por el Museo de la Madre Cándida, vivido como un espacio de contemplación y resonancia interior. Cada joven fue invitado a detenerse con la consigna: “Contempla, déjate afectar, quédate con ese objeto que toque tu corazón… y comparte”. Un momento de conexión con las raíces y el carisma compartido.



Rumbo a la Vigilia del Jubileo
Las Hijas de Jesús despidió al grupo con lo necesario para que puedan almorzar ya en Tor Vergata, donde tendrá lugar la Vigilia del Jubileo de los jóvenes, a la que asistirían miles de jóvenes y posteriormente vivirán la Eucaristía con el Papa. Sellando así este caminar, Jóvenes FI al ritmo del latido de toda la Iglesia joven reunida en Roma.