¡Feliz día de santa Cándida Mª de Jesús!
Después de muchos e interesantes Sabías que… ha llegado el día de celebrar la VIDA de nuestra Fundadora. 110 años han pasado desde aquel «muero tranquilísimamente tranquila…». Tranquila porque todos los momentos de su vida habían sido para Dios. Y fueron para Dios, además de por su misma gracia, porque vivió en profundidad lo que nos pide la Determinación de la CG XVIII a las Hijas de Jesús, porque siguió muy de cerca a Jesucristo.
Cuando seguimos muy de cerca a Jesucristo, el resto de cosas se resitúan.
Cuando seguimos muy de cerca a Jesucristo, lo imposible se hace posible.
Cuando seguimos muy de cerca a Jesucristo, no ponemos la seguridad ni en nosotras ni en los medios sino en Dios.
Cuando seguimos muy de cerca a Jesucristo, parece que vamos en sentido contrario del mundo.
Cuando seguimos muy de cerca a Jesucristo, se da una continua desproporción entre las propias fuerzas y las invitaciones de Dios.
Cuando seguimos muy de cerca a Jesucristo, quienes parecían estar se alejan y las ayudas humanas van a ser otras.
Cuando seguimos muy de cerca a Jesucristo, no faltan penas, tristezas, sinsabores (no pocos llegan precisamente por seguirle), incomprensiones…
Cuando seguimos muy de cerca a Jesucristo, nuestro interior está en calma aunque la vida parezca estar en pie de guerra.
Cuando seguimos muy de cerca a Jesucristo, afrontamos con serenidad las muertes y la muerte porque solo son una forma de estar más cerca del Señor.
Cuando seguimos muy de cerca a Jesucristo, nunca vamos solos porque nos acompaña una legión de testigos que nos muestran con su vida que no nos hemos equivocado.
Cuando seguimos muy de cerca a Jesucristo, encontramos el camino personal al que nos llama y las fuerzas necesarias para seguirlo.
Cuando seguimos muy de cerca a Jesucristo…
Madre Cándida, bendícenos con el crucifijo desde el balcón del cielo para que seamos muy santas, para que seamos verdaderas Hijas de Jesús. Bendice a toda la Familia, que agradece con nosotras tu vida, y llévanos a Jesús.