En camino sinodal desde Roma
Esta apuesta en un doble sentido: primero porque estamos iniciando el tiempo que nos prepara a la Navidad -Adviento, tiempo de espera- y en segundo lugar porque mantenernos en camino sinodal es también vivir en espera y esperanza.
Las actitudes que nos pide el Adviento son también sinodales: escucha atenta, vigilancia, estar despiertos no distraídos, traspasar las apariencias, ir al fondo, abrir los brazos y el corazón para acoger a todos sin discriminación.
Esa invitación universal a participar en el Sínodo actual es también confianza en que la iglesia necesita las aportaciones constructivas de cada persona y por eso podemos lanzarnos sin miedo a decir nuestra palabra, a que no falte nadie en esa gran familia que formamos.
La Iglesia nos invita a continuar nuestro camino sinodal en la Etapa Continental que iniciamos. Ya se cerró la etapa DIOCESANA, cuya síntesis hemos recibido con la satisfacción de ver que las respuestas recibidas superaron todas las expectativas.
Respondieron 112 Conferencias Episcopales de las 114 que existe- Las iglesias orientales contestaron todas, son 15. Dicasterios de la Curia Roma son 23 y respondieron 17. Más de mil aportaciones de personales individuales y grupos. Se recibieron también las elaboradas por la USG/UISG. Muchas personas participaron en las Redes Sociales a través de “Sínodo Digital”-
No fue menos intensa la respuesta de los grupos que consideramos están en los “márgenes” de la Iglesia y que también han deseado decir su palabra: Divorciados y vueltos a casa – Grupos LGTBI – Sacerdotes secularizados – Núcleos familiares diversos – Encarcelados.
Ahora ya damos un salto a los Continentes y se nos formulan algunas preguntas:
¿Qué intuiciones resuenan más fuertemente con las experiencias y realidades concretas de la iglesia en el Continente? ¿Cuáles aparecen nuevas o iluminadoras?
¿Qué tensiones o divergencias sustanciales aparecen como importantes desde la perspectiva del Continente?
¿Cuáles son las cuestiones o interrogantes que deben abordarse en las próximas fases del proceso?
Se busca un diálogo entre las iglesias particulares y las continentales. Siempre a partir del Documento de la Etapa Continental -DEC- que recoge en síntesis todo lo que llegó a la Secretaría General del Sínodo.
Ahora se pueden seguir enviando nuevas propuestas que no se incluyeron en la etapa anterior. Se manda a todos los obispos y éstos organizan un proceso de discernimiento con las preguntas dichas. Cada Conferencia Episcopal sintetiza las respuestas, según su modo y contexto y todo se comparte en la asamblea continental como se hizo antes en las diócesis.
Cada asamblea continental debe elaborar un documento de 20 páginas para enviar antes del 31 de marzo de 2023. Para dichas asambleas se han establecido los territorios de los Continentes de esta manera:
América del Norte – Europa – Oriente Medio – Asia – América Latina y Caribe – África y Madagascar – Oceanía.
Permanecen las actitudes sinodales para no desfallecer en el camino, sobre todo la oración; el diálogo en los grupos, los intercambios… apertura flexible de mente y corazón para escuchar en profundidad. Para contagiar esperanza, engendrando en nuestro corazón esas semillas de quien espera, entre luces y sombras y está dispuesto a derramarlas por doquier.
Alguien viene, llama a nuestra puerta, quizá nos encuentra distraídos. Necesitamos estar alerta para poder recibirle. En serena vigilancia para que no pase de largo, sino que entre y nos transforme.
¡Feliz Adviento Sinodal!
María Luisa Berzosa FI – Roma
