Las noticias de familia, en esta ocasión, nos llegan desde FASFI (Fundación de Ayuda Solidaria de las Hijas de Jesús). Tras dos años de parón por la pandemia del Covid, ha retomado el voluntariado internacional. Aunque, de momento, los dos únicos países a los que se puede viajar son República Dominicana y Bolivia, siete voluntarios están embarcándose en esta misión solidaria que marcará sus vidas para siempre.
Ana ha sido la primera en llegar a Bolivia. Después de mucho tiempo pensando en realizar un voluntariado, en mayo llegó su momento. Durante algo más de dos meses ha colaborado en diferentes proyectos que FASFI tiene en el país y ha visitado las zonas donde están las Hijas de Jesús. Ahora lanza un mensaje al resto de voluntarios:
«La actitud que recomiendo es estar muy abierta, muy atenta y positiva, para aprovechar todas las oportunidades que se te presentan para entrar en la cultura, entenderla y poder hacer algo por los que te rodean e ir participando de ese entramado que teje la red que nos conecta».
En los últimos días de su estancia compartió la experiencia MAG+S SENTIDO SUR «Encontrar Alegría – Bolivia» con Naike Martín FI, coordinadora de la Pastoral Juvenil Vacacional de la provincia de España-Italia, y cuatro jóvenes Elena, Belén, Carmen y Nuria. Una propuesta de encuentro internacional a través del servicio que invita a los y las participantes a vivir su experiencia en base a los pilares de fe, justicia, comunidad, sencillez, servicio, acompañamiento y discernimiento.
Aroa comenzó el mes de agosto viajando a República Dominicana. Durante su estancia ha participado en dos campamentos de verano: el primero en Cotuí, con jóvenes de diferentes partes del país, y el segundo en Elías Piña, con niños y niñas de la escuela. En este último lugar, Aroa ha vivido la experiencia en la casa de una maestra y su nieto, lo que la ha permitido conocer la cultura de esta comunidad que hace frontera con Haití, desde dentro, siendo una más. Antes de volver a España, ha acompañado a las Hijas de Jesús en un encuentro comunitario de la región de Dominicana en Santiago.
En septiembre, FASFI va a realizar por primera vez un voluntariado corporativo junto a Jardanay, una empresa familiar de restauración para colectividades de A Coruña que lleva los comedores escolares de los colegios de Jesuitinas de esta provincia y colabora activamente con la Fundación. Este año han decidido dar un paso más enviando a cuatro de sus trabajadores a República Dominicana. Pilar, Amparo, Beatriz y Jacobo colaborarán con el proyecto «La alimentación importa», en Elías Piña, y también conocerán los proyectos de Santiago y Santo Domingo.
Pilar cierra el voluntariado de este año. Tras acabar sus estudios universitarios, ha decidido embarcarse en esta bonita experiencia y vivirá durante dos meses en Bolivia. Un país que ha elegido para poder reencontrarse con Teresa Ribot FI, antigua amiga de la familia.
Ana, Elena, Belén, Carmen, Nuria, Aroa, Pilar, Amparo, Beatriz, Jacobo y Pilar retoman una parte fundamental de FASFI, el voluntariado, una forma de estar comprometidos con la sociedad y de que nuestras acciones tengan también un efecto multiplicador.
Si tú también quieres ser voluntario, ponte en contacto con FASFI en este enlace.