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Un cuento para Fabiola

abril 24, 2016

“Se nos ha ido de las manos”. Todos comenzó con una idea de Olga, la profesora de 2º de Educación Primaria del Colegio Blanca de Castilla (Jesuitinas) de Burgos. Se trataba de escribir un cuento para Fabiola, una de las niñas de la clase, que tenía leucemia (tenía, porque Fabiola ya está recuperada y ha vuelto al cole), para regalárselo con motivo de su cumpleaños. Y el proyecto se ha convertido, un año más tarde, en un fenómeno social, con una reedición de 200 ejemplares para venta solidaria, con destino el Hospital Universitario de Burgos.
‘Amigos para siempre’ es el título del cuento, elaborado por los compañeros de Fabiola, bajo al coordinación del escritor burgalés Roberto Llorente, que es padre de una de las escolares. El proyecto nació el año pasado, recuerda Llorente. Olga dividió a la clase en parejas, para que cada una de ellas elaborase su propio relato. El escritor solo les dio una pauta: la historia debía estar protagonizada por tres amigos, Fabiola y dos hermanos gemelos que llevasen por nombre Fabio y Lara.
Los textos y las ilustraciones son obra de los alumnos de Primaria
Estilo libre… así que los niños han ambientado sus historias en un zoo, un acuario, un mundo de gominolas o una fuente mágica, un poco caótico a la hora de aglutinar los textos en un único escrito. Sin embargo, Llorente asegura que “ha sido todo un éxito”. En su momento, se editaron tres ejemplares del cuento, ilustrado por los propios alumnos, que fueron entregados a Fabiola, al cole y al propio escritor. Pero los padres del resto de los alumnos empezaron a pedirlo y, un año más tarde, ha tocado hacer una reedición con 200 ejemplares.
La iniciativa se presentaba en la tarde del jueves en la Sala Cultura de la Librería Hijos de Santiago Rodríguez, en el Centro Comercial ‘Camino de la Plata’, y Llorente reconocía que se habían quedado cortos con esos 200 ejemplares. Cada libro cuesta 9,50 euros y el dinero recaudado se destinará al Cole de los Pijamas del HUBU, el programa que permite a los niños ingresados seguir recibiendo sus clases con cierta normalidad. Lo que necesiten, se les comprará, explica el escritor burgalés.

Por Patricia Carro

Publicado en Burgos Conecta

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